Pese a mi realismo insistente y mi tendencia a no a ver las cosas color de rosa realmente creí que estábamos destinados a ser, pensé que esta sería "la anécdota" esa que cuentas como el mayor obstáculo que existió pero que a final de cuentas desapareció del camino.
Aún hoy no se si me he hecho entender, si realmente alguna vez te lo dije, si te conté que quería ser tu apoyo, la que te esperara con los brazos abiertos y ser el impulso suficiente, ese que dices necesitar, esperaba que fueras aquel que sabía que había hecho esto no por alejarme sino por buscar construir un futuro mejor para los dos, quería que estuvieras aquí, conmigo, que nos hiciéramos fuertes juntos en esta ciudad extraña para ambos, que hablaramos los problemas de frente... Sabes? nunca esperé que pasara esto, realmente creí en ti, en mi, en nosotros... confiaba en que éramos lo suficientemente fuertes y honestos pero sobre todo que ambos queriamos y creíamos en esto, y que los dos luchariamos por ello; me equivoqué, al final de cuentas los dos nos cansamos, y terminamos bajando los brazos cada uno de manera distinta.
Ahora... solo creo que no hay vuelta atrás...
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